Todos, o casi todos, los derechos prescriben por el paso del tiempo. Es decir: se acaban. La prescripión extintiva o liberatoria se produce por la inacción del acreedor por el plazo establecido por cada legislación conforme la naturaleza de la obligación de que se trate, y tiene como efecto privar al acreedor del derecho de exigir judicialmente al deudor el cumplimiento de la obligación. Para lo que nos interesa aquí el acreedor es el casero, el deudor el inquilino…
