Como consecuencia del impago de las rentas correspondientes a los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre de 2011 y enero de 2012, un juzgado de primera instancia de León declaró resuelto el contrato de arrendamiento de un local de negocio y condenó a la arrendataria a abonar a la arrendadora 5.402,82 euros, la suma de las rentas de esos cinco meses más la renta del mes de febrero de 2012. El juez consideró probado que el día 29 de febrero…
