Como en cualquier piso o casa, en una vivienda de alquiler las reparaciones y el mantenimiento son algo crucial. Si no se actúa el inmueble se deteriora a ojos vista. Sin embargo, la redacción del artículo 21 de la Ley de Arrendamientos Urbanos no ayuda mucho a precisar qué obras o reparaciones le tocan al inquilino y cuales al casero. El apartado 4 del artículo solo nos dice que las pequeñas reparaciones por el uso ordinario de la vivienda…